EL DESPERTAR DE LA FUERZA

“La presión” por no respetar mis teorías y puntos de vista sobre hasta dónde creo que puedo llegar en 10 kms (34-35 min), el desprecio hacia mi deseo y gran ilusión por llegar allí, están despertando en mí una fuerza de voluntad que ha permanecido muy dormida todos estos años atrás, aún no es clara, pero se está despertando gracias a ese presión.

Por desgracia no buscan esto esos comentarios, más bien lo contrario, que me conforme con estar donde estoy, que no moleste o que diga que me gusta correr detrás de los que ganan carreras o suben al podio, cuando puedo dar más. 

Al final siempre me quedo como un mero espectador de lo que pude haber hecho en esa carrera y no hice, cuando quiero correr a lomos de mi talento, no por ego, sino porque le viene bien a una autoestima en horas algo bajas…quiero sentirme triunfador y no un fracasado, por no ser capaz de llegar a donde creo que puedo y merezco llegar, a donde debo llegar.  Acaso eso es malo???, a veces, según para quien, es malo, incomoda y molesta ver a gente triunfar, quien sabe por qué, pero es así, llámalo envidia, que cada palo aguante su vela…yo estoy trabajando para triunfar y al que le de envidia, que haga lo mismo, que a mí nadie me va a regalar nada, más bien solo por desearlo en voz alta me quieren tirar a los caballos…no estoy cabreado, estoy con ganas de poner mis piernas, mi corazón, y mi cabeza al servicio de donde merecen estar. Estoy hecho de buena pasta para correr y es hora de que se vaya viendo, no ahora, ni mañana, todo es progresivo, lento, pesado, trabajando en la sombra, aguantando comentarios que tiran a dar, pero sale, al final saldrá la imagen del triunfo, saldrá, lo sé  y su representación más clara, será cuando haga algún podio el próximo año y será, sucederá, ese día llegará, pese a quien pese.

Ahora soy un auténtico fracasado, un aparente vende humos, pero ya estoy trabajando para que esto no sea siempre así, no puedo seguir dándome el lujo de no aprovechar el  talento que tengo para correr, grande o pequeño pero talento al fin y al cabo, que lleva enterrado 27 años. Es hora de quitarle el polvo, es hora de despertarlo…es hora de reencontrarnos y darnos un fuerte abrazo, nos lo merecemos.

“Antes de que yo pudiera subir al ring, yo ya lo habría ganado o perdido todo en el camino. La verdadera parte es ganada o perdida en algún lugar, sin que nadie te vea, corriendo en la madrugada, en el gimnasio y ahí gané, mucho antes de que yo peleara bajo aquellas luces”. Muhammad Ali.