La semana pasada no comenzó del
todo bien, el lunes por costumbre no habría entrenado, tras un día de
competición prefiero descansar y más si el día anterior lo di todo como así
fue, pero el entrenador consideró que era bueno hacer gimnasio y rodaje suave.
El rodaje no lo hice tan suave como debía y en el gimnasio como siempre me fajé
bien con lo que al final de ese lunes me noté muy cansado por acumulación de
fatiga, sentía el pecho cargadillo:
Lunes, 21 de agosto: 8.83 kms en 51:08 a 5:47 por km, mas gimnasio.
Habría sido mejor hacer el rodaje a 6:30 y mejor aún ni siquiera haber
entrenado en este día.
Miércoles, 23 de agosto: 4.42 kms en 24:36 a 5:34 por km.
Miércoles, 23 de agosto: 3.93 kms en 25:44 a 6:32 por km.
Querría haber hecho en este
miércoles, 15.4 kms a 5:30 para confirmar mi buen estado de forma, pero me pasó
factura no haber descansado el lunes y seguía sintiéndome cansado, además el
martes me había metido 2 horas andando y tampoco eso ayudó a la recuperación.
Lo ideal habría sido descansar el lunes y seguramente hoy habría sacado bien
esos 15 kms a 5:30, pero bueno, en realidad por propia experiencia las mejoras
en mi caso no vienen tanto por el
entrenamiento como por la simple pérdida de peso.
Viernes, 25 de agosto: 7.32 kms en 45:13 a 6:10 por km. Suave
rodaje, de hecho tuve que irme frenando. Comencé con las piernas muy pesadas y
luego me fui sintiendo mejor aunque nunca me sentí de lujo, de eso que sientes
que sólo disfrutas, simplemente tocó cumplir con un suave rodaje previo a una competición.
Que ir a 6:10 lo considere rodaje suave deja claro mi mejora continua, antes
(hace dos meses y medio) ese ritmo era literalmente echar los higadillos.
Sábado, 26 de agosto: 5.57 kms en 27:24 a 4:55 por km. (la crónica en la próxima entrada, el jueves o
viernes).
Tocó competir. Nada más empezar
nos cayó un chaparrón que nos dejó calados y con peso de más por el tema de la
ropa y zapados calados y con ese chaparrón nos mantuvimos corriendo durante
unos quince minutos que duró, luego enseguida dejó de llover pero ya no era lo
mismo que una carrera en seco. Salí demasiado atrás lo que me obligó a
completar un primer km demasiado lento, también el chaparrón tuvo bastante que
ver en esto junto con viento en contra que se dejaba notar y que tuvimos en
esos momentos y en el último km de la carrera esperé a mi compañera de equipo y
amiga Erika porque se le desataron los cordones de la zapatilla, así que muy a
tope no hice esta carrera, está claro que me dejé una o dos balas en la recámara,
lo cual se agradece mucho y es lo que hay que hacer porque por experiencia se
que en estos momentos tan solo perdiendo peso llegan mejores marcas. Por cada
kilo que pierdo mejoro un minuto mi marca en 10 kms, así que sabiendo esto,
pues como que esforzarse en exceso es un poco hacer el tonto y yo ya no estoy
para tonterías.
Por fin apareció el 4, en este
verano, ha llegado justo a tiempo en la última competición del verano. De nuevo
he sido puntual con mi cita del verano y esos 4 y pico min por km, que tanto me
gustan y me hacen sentir tan rápido y bien, que lujazo, que maravilla...
Corrí sin voladoras, por lo
mismo, si mejoro perdiendo peso dejemos el resto de las armas en casa para
cuando la pérdida de peso deje de ser un aliado porque ya no haya más peso que
perder.
Estoy en 81.4 kilos (el día 26),
calculo que mi marca ahora en 10 kms rondara los 50:30, sin ir sufriendo y sin
voladoras, así que pensemos en 70 kilos como peso al que llegaré y salen 39
minutos de marca en 10 kms, sin usar series, ni voladoras, solo con gimnasio, rodajes
suaves y rodajes algo más exigentes a ritmo de 20-30 segundos por km más lento
que el ritmo de competición y evidentemente esos 39 minutos serían un ritmo no
muy exigente, no iría a tope, no iría a ese ritmo echando los higadillos ni
sufriendo, quedaría todavía como en la carrera del sábado una dos balas en la
recámara, así que sabiendo como sé esto, por como he ido perdiendo peso estos
años atrás y mejorando marcas a la par, no tiene sentido dejarme los higadillos
en las competiciones hasta que ya esté en mi peso y toque meter zapas
voladoras, series, calentamiento y toda la artillería pesada, ahí si que se me
verá competir y probablemente sea en los primeros puestos de estas carreras de
León (será normal verme entre los 15-20 primeros de la general). Cuando esté
compitiendo por un podio de mi categoría, ahí habrá que sufrir pero en eso soy
bueno, cuando me juego algo, saco lo mejor de mi, pero para eso aún quedan
kilos por perder...calculo que estaré dando este tipo de guerra en febrero-marzo
del 2018, hasta ese momento habrá que seguir entrenando contando solo con la
pérdida de peso que es una gran arma de mejora, la más importante hoy por hoy.
Estoy en mi mejor momento del año
y esto apenas está empezando...ya estoy tocando a la puerta, con esos 50:30
teóricos que valgo (sin ir a tope), al sub 50. En un mes espero estar ya por
debajo de 50 minutos, ya iremos viendo...