El pasado sábado fuimos Blanca y
yo a pasar la noche en el AC de Gijón, llegamos como a las 6:30 de la tarde.
Al día siguiente, a las 7:45 me
tocó levantarme, por suerte con el cambio de hora dormimos una hora más, aunque
me hubiera gustado descansar mejor, me despertaron a las 6 de la mañana los
ronquidos del de la habitación de al lado y aunque luego pararon ya me desveló
y no saqué mucho descanso del tiempo que quedaba para levantarme. A las 8:30
pasaría por mi José Manuel, que también corría los 10 kms de Gijón como
preparación para su maratón de Valencia, del próximo día 19 de noviembre. Así
que me duche, me vestí con pantalón corto, manga corta, medias compresoras, y
solo parte de arriba del chandal. Desayune un cruassant pequeño relleno de
chocolate, media cookie y un vaso de batido de chocolate, la noche anterior había
cenado un vaso de batido de chocolate, cruassant pequeño relleno de chocolate y
una lata de atún, así que ni tan mal. Los días previos había cuidado la alimentación
y llegaba a esta cita con el peso mas bajo del año, 78.5 kilos, así que en
perfecto estado de forma, todo apuntaba a que hoy podía ser un gran día, hoy podía
haber record, hoy podía llegar a los 47 minutos.
A las 8:30 paso por mi José
Manuel, me dejó cerca de casa de su hermana, que está a 200 metros de la
salida, puro lujo, fui a por mi dorsal y camiseta y luego fuimos a desayunar
por allí, el desayunó, yo solo tome agua. Ahí le comenté mis intenciones de
esos 47 minutos y él, pesimista por naturaleza, me daba 48 altos o 49 y pico.
Tras la charla desayunil subimos a casa de su hermana, nos pusimos el dorsal,
dejé allí la bolsa del corredor y la parte de arriba del chandal, él se fue a
calentar y yo me fuí hacia la zona de salida a disfrutar del ambiente, aún
quedaban 45 minutos para la salida, un mundo...así que me distraje por allí y a
eso de las 10:15 me puse a calentar 10 minutos, ohhhh, milagro, trote suave a
130-135 pulsaciones por minuto, decidí hacerlo en una zona de sombra, ya que el
sol picaba bien pese a tener 16-17 grados, era molesto, así que se agradecía la
sombra. No había, ni hubo nada de viento, solo sensación de calor. Hay que
recordar que salíamos a las 10:30 que sin el cambio de hora eran las 11:30, así
que el sol ya picaba lo suyo.
En el calentamiento no noté las
piernas entonadas, estaban mustias, ni palante, ni patras, neutras, lo cual no
era una buena noticia.
A las 10:30 salimos puntuales, mi
estrategia es clara, ir por pulsaciones, no por tiempos, pese a que me había
hecho una tabla de ritmos km a km, en función del perfil de la carrera, que conocía
perfectamente, para alcanzar esos 47 exactos pero también había hecho una tabla
de pulsaciones km a km que sí que había que cumplir y era así: 160-165-170-170-175-175-175-180-180 y 180,
lógicamente aproximado, al final mi idea era irme a 185 pulsaciones o más si
realmente me daba por darle caña y sufrir.
Me sitúo cerca del globo de los
50 minutos a unos 30 metros, por detrás. El primer km debería salir a 4:45 si quería
tener opciones de llegar a esos 47 minutos, corremos unos 1400 con lo que se
puede correr pero con cuidado. Por delante veo a José Manuel, me emparejo con
el pero al final el tira un poco más hacia delante, unos 15 metros y yo me
quedo vigilando al globo y comprobando mis sensaciones. Las piernas no van
pesadas pero tampoco van solas, sueltas, neutralidad total, voy avanzando a
buen ritmo, sin embargo en el km 1 me doy cuenta que no es el ritmo que debía
ser pues completo este primer km en 4:52 y 162 pulsaciones de media, ahí mismo
me doy cuenta por las sensaciones además que tengo que no habrá marca personal,
entonces mi objetivo pasa a ser bajar de 49 minutos.
Seguimos avanzando, me adelantan, adelanto, con tanta gente no tengo referencias de a quien seguir y sólo me guío por mis pulsaciones que vigilo bastante para guardar de cara a todo lo que queda y así en el segundo km, que también es de ligera subida, un 2% pero que se nota porque es durante 2 kms, doy un ritmo de 4:59 y 169 pulsaciones de media, me vale, no pasa nada. A José Manuel lo he perdido de vista y me imagino que ira pegado al globo que tengo a unos 40-50 metros, pero se me desata el cordón de la zapatilla acabando ya la subida y tengo que parar a atarme, cuando las cosas no salen, no salen...se me aleja el globo, no me preocupa.
Seguimos avanzando, me adelantan, adelanto, con tanta gente no tengo referencias de a quien seguir y sólo me guío por mis pulsaciones que vigilo bastante para guardar de cara a todo lo que queda y así en el segundo km, que también es de ligera subida, un 2% pero que se nota porque es durante 2 kms, doy un ritmo de 4:59 y 169 pulsaciones de media, me vale, no pasa nada. A José Manuel lo he perdido de vista y me imagino que ira pegado al globo que tengo a unos 40-50 metros, pero se me desata el cordón de la zapatilla acabando ya la subida y tengo que parar a atarme, cuando las cosas no salen, no salen...se me aleja el globo, no me preocupa.
Toca ya bajar lo subido en los 2
primeros kms y pico y marco el km 3 en 5:06 y 169 (hay que descontar 12-13
segundos de maniobra de atado, así que realmente este tercer km habría salido
en 4:53 y en subida una parte aun, muy bien realmente, aunque no era lo que debía
ser).
El km 4, de bajada, lo completo
en 4:52 y 170, clavado al guión de pulsaciones, pese a no ir cómodo, no tengo
dificultad para cumplir con ese guión pero el calor me haciendo de las suyas y
voy como digo incómodo.
El km 5 es llano y bajo un poco
el ritmo para pillar agua, bebo agua, me la hecho por encima y me da vida, me
resucita, las piernas de repente tienen un chute de energía y lo aprovecho para
correr un poco mas rápido, sin forzar, a petición de las piernas, como si me
hubiera tomado un gel, en cambio sólo era agua, así que estaba claro que el
calor no me ayudaba precisamente en este día. Sale este km en 4:47 y 169
pulsaciones medias.
En el sexto km todavía me
aprovecho del espejismo energético del agua y subo pulsaciones para mantener
este buen ritmo, cerca del que tenia que haber pillado en los dos primeros kms,
es llano también y me siento bien, voy adelantando a gente, algo que no pasó en
los anteriores kms y al ver el parcial de 4:47 y 176 pulsaciones, veo posible
al menos el sub 49, que de alguna forma también me habría dejado satisfecho.
Pasado el km 6 toca el siguiente
km subir, ligera subida pero mayor que la de los dos primero kms, con algún
tramo del 4%, hay que regular y no cebarse, voy vigilando pulsaciones. Cuando acabo
esta última dificultad del recorrido miro el crono y veo que me han caído 5:14
a 179 de media, bufff, además el calor sigue apretando y ya no hay agua a mano,
ahí empiezo a pensar que todo se ha acabado, aún puedo salvar los muebles si
sale bien el siguiente km pero ya me noto atascado, voy incómodo de nuevo y
tampoco quiero sufrir aún, las piernas vuelven a estar perezosas y hay que
obligarlas, vuelven a no ir solas, la cuesta les ha hecho daño, bastante daño,
me van adelantando de nuevo y no veo la forma de evitarlo salvo forzando pero
no quiero forzar, llego así al km 8 que por momentos fue de ligera bajada con
un parcial de 5:07 y pulsaciones de 176 que no son muy altas pero dejan claro
que las piernas no tiraban hoy y el calor no ayudaba a ello. En ese momento
entra en acción la cabeza, esperaba un mejor parcial, las sensaciones no son
buenas, hace calor, las piernas no van así que decido no sufrir y dejarme
llevar, se acabó lo que se daba, bandera blanca, hoy no será ni el día del
record, ni el día del sub 49, ni el día del sub 50, simplemente hoy no será el
día...
Un corredor experto debe saber
cuando apretar, como apretar, donde apretar, también que cuando no es el día y
ya está todo hecho hay que saber cuando abandonar, como abandonar y donde abandonar
y guardar fuerza para futuros entrenamientos, competiciones, donde el cuerpo y
las fuerzas si que acompañen, así que en este km 8 di por bueno todo lo
realizado y ya no había nada mas que hacer, fajarme en esos dos kms finales ya
no llevaba a ningún sitio. El sub 50 saldrá en los entrenamientos de noviembre,
así que esto que era lo único que podía rescatar en este día tampoco era un
aliciente; solo valía haber luchado en esos dos últimos kms por una marca
personal que nunca tuve en las piernas, que desde el km 1 se alejó pero ya que
fui a Gijón había que correr pero si no había opciones de marca personal, no
tenía sentido pasarlo mal y sufrir en los dos últimos kms.
En los últimos 2 kms, que son muy
fáciles, son completamente llanos, me van adelantando, me dejo llevar, el globo
sub 50, que siempre estuvo lejos, se aleja más aún, ya hay sombra pero me da
igual, vamos pegados al paseo marítimo, es una larga recta, se ve al fondo la
meta pero ni me inmuto, no pienso regalar más esfuerzos, no disfruto pero
tampoco sufro, me dejo llevar y deseo que todo termine cuanto antes pues no voy
nada cómodo corriendo, voy forzado, que no forzando y así llego a los 10 kms de mi Google Earth y marco un
tiempo de 50:52 a 5:05 por km, nueva
marca personal de 10 kms de este año y al igual que el año pasado vuelvo a ser
capaz de bajar de los 51 minutos pero no de los 50 minutos, para ello tendría
que haber sufrido un poquillo y no estaba dispuesto, no valía la pena. Bajar de
5 el km en 10 kms lo podría hacer sin matarme en cualquier entrenamiento, en
cualquier momento de lo que quedaba de año, había que guardar cartuchos para
futuras guerras.
Ese parcial de 2 kms finales
llanos y a la sombra, salió en 11:05 a 167 pulsaciones medias, estaba claro que
ya me deje llevar...aun quedan 80 metros pues la organización estimo que sus 10
kms eran los 10.08 kms de mi Google Earth y los completo en 36 segundos, hago
parte de esos últimos metros de regalo andando...para mi la carrera terminó en
mis 10 kms, esos 80 metros ya no contaban...pero bueno...así que completo esos 10080 metros en 51:29 a 5:06 por km. Las
pulsaciones finales fueron de 170 las medias y 182 las máximas. El guión de
pulsaciones, salvo por los dos últimos kms, fue bastante fiel al planeado y fue
un acierto, así que por ahí me quedé bastante contento.
Tras cruzar la meta recojo la
bolsa que dan al llegar a meta que contiene agua, zumo de naranja, una bolsa de
fritos y manzana, busco a José Manuel pues pensé que habría llegado con el
globo, pero no esta por allí, lo busco por la zona del podio, vuelvo a la zona
de meta y por fin lo veo, tardó un minuto más que yo, hizo los dos primeros kms
a 4 cincuenta y poco para luego relajarse e ir por momentos a 5:35 ya que hoy
no le tocaba darle caña al tema, no tenia sentido de cara a su maratón. De
haberle dado caña seguro que habría llegado por delante mío, una vez más.
Corrieron entre chicos y chicas
unos 1400, como otros años, así que bien, buena participación no muy
masificada, se podía correr bien. Lástima el calor pero es un buen circuito
para hacer marca, eso si. El viento al menos respetó, no hizo nada de viento.
Tras la carrera, volvimos José y
yo andando desde la Meta, situada a la altura de la Plaza Mayor de Gijón, hasta
la salida, en el complejo deportivo de Las Mestas, para llegar a casa de su
hermana que vive por allí cerca, recoger las cosas y llevarme de vuelta al
hotel donde me esperaba mi queridísima Blanca y al que llegue a las 12:45, con
tiempo de sobra para ducharme y tomarme otro batido de cacao con un par de
pequeños cruasants rellenos de chocolate. A las dos menos veinticinco (el hotel
me dejó quedarme hasta las dos, puro lujo...) regresamos Blanca y yo a León,
llegando a las 3 de la tarde. Volví sin premio pero con la satisfacción de
haber hecho lo que pude y no haber forzado tontamente para conseguir algo que
no habría significado nada. Podría haber sacado un 49 y poco a costa de sufrir
pero eso no tenía sentido, así que hice bien en levantar el pie cuando vi que
todo el pescado estaba ya vendido. Una vez en casa comimos unas ricas
albóndigas en salsa con patatas fritas, muy rico todo. De postre capuchino y
natillas de chocolate.
La carrera está claro que me dejó
cariacontecido, llegué a ella con el peso más bajo del año, con mi mejor estado
de forma del año avalado por unas magníficas series, habiéndome alimentado bien
los últimos días, que falló???, el calor, las piernas no quisieron correr y mi
nuevo peso de 78.5 kilos había que consolidarlo y utilizarlo en el circuito de
11.7 kms y 15.4 kms y no lo pude estrenar en ambos circuitos. Digamos que me
faltó una semana más quizá para haber traducido ese novedoso peso en una forma
más alegre de correr y no la pude probar, tuvo que ser en el propio examen de
los 10 kms y si encima las piernas no van, apaga y vámonos...
Si alguien quisiera llenarse de
razones para argumentar que correr se le da mal, ese alguien bien podría ser yo
mismo. Es curioso que mucha gente, en su primera participación en 10 kms, logra
bajar de 50 minutos y son unos recién llegados y yo tras 11 años dándole a este
deporte me las veo y me las deseo para conseguirlo y aun así no lo consigo,
solo salió, con cierta frecuencia, eso sí, en el 2015. El resto de años no he
visto el sub 50, curioso...bueno podría haber salido en este 2017, en estos 10
kms, pero a costa de sufrir y no estaba por la labor. Se me da mal correr???,
en honor a la verdad es que sin hacer series y sin tener un peso adecuado
(tengo 10 kilos de más) esto es lo que hay. No se me da mal correr, no soy un
paquete realmente, lo que pasa es que hay que hacer series y perder peso.
Las próximas semanas estarán
dedicadas a perder peso y hacer series, con la idea de poder hacer los 5.85 kms
del 30 de diciembre, en la San Silvestre de Cádiz, a un ritmo de 3:59 el km y
de esta forma salvar el año 2017. Con esos ritmos no sólo lo salvaría sino que
lo elevaría a los altares, convirtiéndolo en el mejor de mis años, así que lejos
de salvar el año, aún puede ser el mejor año de todos, aún se puede hacer todo,
es cuestión de tener un poco de disciplina, pico y pala y a seguir¡¡¡¡.
Vamos¡¡¡¡.
Hay 9 semanas por delante, para pasar de esos 5:05 por km en 10 kms a 3:59 por km en 5.85 kms.
El 30 de diciembre quiero mis 3:59 por
km...
Ah¡¡¡, lo olvidaba, así diseñe mis 47 minutos que al final no
salieron: 4:45, 4:45, 4:40, 4:40, 4:40,
4:45, 4:50, 4:40, 4:40, 4:35.