QUE LOCOS ESTAIS

Este es un buen vídeo que la mayoría seguro que conocéis y refleja claramente uno o varios aspectos del día a día de cualquier corredor.

Yo llevo ya un par de meses cuerdo, me cure, pero ya veremos cuanto me dura este nuevo estado, pinta para largo, pero ya veremos…

Eso si, recuerdo bien aun cuando estaba loco, que tiempos aquellos…cuando la ambulancia se calaba una y otra vez detrás mío, no se si miraba de vez en cuando para atrás por miedo a ser atropellado por el tío que cabreado pudiera optar por quitarme por las malas del medio o para decirle con una sola mirada hago lo que puedo, el caso es que el tipo me invitaba a retirarme y esto es literal y yo erre que erre jugaba con el riesgo de agotar su paciencia, al final ganaba a la ambulancia porque me dejaba llegar a meta sin atropellarme. Algunas veces corrí contra la ambulancia antes de correr contra mi y los otros y es que la ambulancia tan maja era que me dejaba ganarle. Gane a la ambulancia siempre, una y otra vez.

Recuerdo también cuando la lluvia era mi enemiga y se volvía incluso muy fría para quitarme las ganas y la moral, en ese caso la lluvia una sola vez ya muy cabreada y muy fría me ganó, me hizo claudicar y buscar refugio, el resto de ocasiones gane yo también.

Recuerdo cuando traté de ganar a gente de 80 años porque no había más referencia para mi, el resto, incluso los de 80 años me ganaban, todos me ganaban y en mis principios la mayoría de las veces me ganaron, pero al final quizá un poco cansado de tanta derrota logré ganar yo también.

El sol también trató de eliminarme de alguna carrera y fue muy incisivo en ello, pero al final también sacando fuerzas de donde no había logré ganarle a el y a los calambres que me mandó porque el solo no podía, a los dos les gane y llegue a meta.

La falta de agua en alguna carrera también trató de quitarme del medio pero yo previsor logré hacer uso de zumo que yo mismo llevaba y me queje a quien pude por simple desahogo sin lograr nada, toda una conspiración para quitarnos del medio a los últimos pero gané otra vez y llegue a meta.

Cualquier agente externo ha sido batido por mí pero a quien no he podido ganar es a mis rodillas, es a mi pie, es al colacao, nesquik, galletas o bollería, esos todavía me ganan y han provocado que recupere la cordura tras dos meses sin poder correr. Ahora estoy trabajando, estoy intentando volver a ser tan loco como antes, me estoy entrenando para ello con caminatas casi diarias para cuando de el salto no me sienta extraño por haber dejado atrás la cordura, en algún momento, en algún lugar, con algún gesto.

Hoy estoy cuerdo, algo cuerdo pero tiene cura y la sigo buscando zancada a zancada en mis caminatas, día tras día y la encontraré y volveré a ganar una y otra vez a todos los que antes gané, incluso a mi mismo.