10 KMS DE GIJÓN Y 10 KMS DE LA BAÑEZA. FIN DE SEMANA INOLVIDABLE

El fin de semana del 4 y 5 de mayo, pasará a mi historia como la primera y espero única vez, que competí dos días seguidos y con menos de 24 horas entre carrera y carrera.

El sábado 4 de mayo, a las 11:30, llegamos los tres a Gijón, ya que teníamos que comprar una silla para la peque. Dormí 4 horas y media y con dos interrupciones, es cierto que el cuerpo se me va haciendo a dormir poco, pero no quita para que no eche de menos mis 8 horas de antaño y con cierta frecuencia, sobre todo cuando entreno o compito. Así que eché de menos esas horas no dormidas y necesarias para rendir en condiciones, para poder llevar durante una hora mi corazón a 175 pulsaciones, que era lo que con frecuencia pasaba en el pasado cuando estaba fresco y tocaba competir.

A la 1 terminamos con la gestión de la compra de la silla y nos fuimos a Las Mestas a por el dorsal, de paso me hice de EDP para la luz y así el dorsal de 16 euros me salió gratis. Tras esto quedamos con unos amigos para comer, cayeron unas croquetas de queso de cabra y dos huevos con patatas fritas y jamón, más el pan para mojar, de postre arroz con leche. Después de comer fuimos a casa de estos amigos y la peque estuvo allí haciendo las delicias, yendo de un sitio a otro por el suelo con unas pelotas que les dejaron estos y así charlando y disfrutando de la peque pasó el tiempo volando y casi sin darme cuenta tocó ir hacia la salida, viven a 3 minutos de la misma y de hecho el coche lo dejé en su garaje, tenían una plaza libre.

A las 5:50 ya estábamos allí en la salida, frente al complejo deportivo de Las Mestas, desde donde siempre salen los 10 kms y la media, concretamente en la Avenida de Albert Einstein.  Día soleado y unos 16 grados, sin viento, gran día para correr, mucha gente andaba calentando, estirando, trotando y otros como yo, no, pa que, ya si eso en carrera…eso me lo reclamó mi amigo que no corre, que por qué no calentaba…ya sabe que soy un poco pasota, pero es que no estoy en forma para darme el lujo de calentar. Por allí apareció el bueno de Jose Manuel y charlamos brevemente, era una media pero le comenté que yo solo haría 10 kms, que no estaba para medias. Nos deseamos suerte, luego me contó que hizo 1h:50, así que muy bien, es su línea cuando está en forma.

A las 6 salimos. Somos unos 2000 y me sitúo justo con los últimos, como siempre, pero enseguida me doy cuenta de que la mayoría de esos últimos van un poco lentos, así que les voy adelantando buscando huecos, sin prisa pero sin pausa y así subiendo por La Avenida Pecuaria, continuación de la de Albert,  paso el primer km en 5:38, pulsaciones de 154, bien, voy bien, vamos de subida, este recorrido ya lo he realizado en 6 ocasiones más y me lo sé de memoria, no es una fuerte subida (2.3 kms al 1.5% y máxima del 5%) pero se va dejando notar un poco. El km 2 lo completo  en 5:54, 161 pulsaciones, también de subida; 200 metros más allá llegamos a la rotonda, giro de 180 grados y ahora a bajar lo subido por la misma Avenida de la Pecuaria, todo con un montón de gente siempre alrededor, unos me adelantaban y a otros les pasaba yo, aunque esto sucedió más en los dos primeros kms, tampoco me preocupaba, estaba yo en otra carrera, mi carrera contra el crono. El km 3 de bajada sale en 5:37 y 164 pulsaciones, el 4 también de bajada (se bajaba lo subido en el 1 y 2) en 5:45 y 168 pulsaciones. 

A la altura del km 4.36, todavía bajando hay una rotonda, giramos a la derecha y entramos en la Avenida De justo del Castillo y Quintana y así iremos paralelos al Río Piles durante poco más de un km y medio hasta su desembocadura en el mar. Pasamos en bajada aún por el km 5 en 5:43 y 166 pulsaciones, al ser de bajada se hace bastante llevadero este km también y algo disfrutable, no todo lo que me hubiera gustado ya que las piernas no estaban tampoco a tope de frescas y andaba algo cansado.

El km 5 coincide con el avituallamiento, pillo la botella y la voy bebiendo a sorbos sin parar y la otra mitad me la echo por encima y también coincide con una rotonda, tras pasarla entramos en la Calle del Dr Fleming, seguimos bajando cómo es lógico al ir por la rivera del Piles y por momentos disfruto un poco más, se me hace como más llevadero, las piernas en este km iban como solas, corrí muy fácil, me doy el lujo de parar a chocar manos con unas niñas y niños ilusionados con eso de chocar, voy bastante cómodo.

 Llego al km 6 con parcial de 5:45 y 174 pulsaciones. 250 metros más allá subimos un pequeño repecho que nos lleva a una rotonda para girar a la derecha y entrar en la Carretera Piles al Infanzón, esto por experiencia es un momento crítico, es el km más complicado de todo el recorrido porque llega cuando uno tiene un cierto desgaste y porque en los últimos 360 metros hay una pendiente media del 2% y máxima del 5.5% y eso se nota, claro que se nota. Corro muy concentrado este km, sabiendo por experiencia de su importancia, aquí están mis opciones para bajar o no de la hora y así voy avanzando paso a paso, con cierta incomodidad por el estómago, así llevo desde el km 2 más o menos, la comida ahí la tengo aún pese a que pasaron 2 horas desde la misma, pero comer huevos fritos con jamón y croquetas de queso cabrales más un postre de arroz con leche, no es precisamente una comida ligera para afrontar luego 10 kms y además el cardio ya va más forzado, pero sigo avanzando con la firmeza de que hay que evitar perder demasiado tiempo, sin tampoco fajarse en exceso y el resultado de todo esto fue un excelente km con parcial de 6:03 y 174 pulsaciones. (Obsérvese mi técnica que se aleja del taloneo y busca correr más hacia adelante, sin entrar con el talón).

Vamos a por el km 8. Tras pasar el km 7, se gira a la izquierda para pasar por una zona de chalets hacia la Avenida José García Bernardo, ya vamos pegados al mar, este km también se me hace largo y difícil, parece que nunca llega el 8, bufff, se me hace bastante pesado, no tiene un perfil exigente pero estoy pagando el esfuerzo del anterior km, sobre todo a nivel de piernas aunque también a nivel de cardio llevar 2 kms a casi 175 pulsaciones, se nota. Paso por el km 8 con parcial de 5:47 y pulsaciones de 173, otro km bien salvado.

El primer medio km del km 8, camino ya del 9, también se me hace muy pesado, hasta el punto de olvidarme de chocar a chavales que hay entre el público, mucho público, ya en pleno paseo marítimo de la Playa de San Lorenzo (Avenida Rufo García Rendueles), el cual me ayuda a llegar al km 9, no por animarme a mí, sino por la distracción que supone contemplar ese buen ambiente, que lo hace más llevadero, además el perfil es prácticamente llano sin grandes complicaciones.

El km 9, lo paso en 5:48 y 176 pulsaciones medias, voy al mismo tiempo viendo como los primeros van ya de vuelta hacia las mestas por el otro carril de esta Avenida y eso también entretiene y así entre el público y los primeros me dirijo por la misma Avenida hacia la meta, llegando a la Calle Ezcurdia (mismo paseo marítimo) y Calle Cabrales que es donde está situada mi meta, pegados al paseo marítimo de la Playa de San Lorenzo, justo al final de la misma; el resto siguió corriendo como es lógico en busca de sus medias maratones, que pereza me dio…menos mal que no estaba en esas y yo ya había terminado, perezón total habría sido seguir corriendo, un castigo sin sentido.

Poco antes del km 10 está Blanca que me hace unas fotos pasando por el hinchable de los 10 kms, sigo un poco más y paro el crono en mis particulares 10 kms con parcial de 5:46 y pulsaciones de 179, no se puede acabar mejor. Ha sido una carrera perfecta, sin dejarme los higadillos, pero que me dio para bajar de la hora con bastante margen, que hice muy regular y consistente y de menos a más, ahí están las pulsaciones que lo demuestran, así que una maravilla. Tiempo final de 57:49 a 5:46 el km, con pulsaciones medias de 169 y máximas de 182, así que muy bien. Llegué en el puesto 1880 de 1998 corredores que pasaron por este km 10, aunque claro está, la mayoría siguió corriendo.

Mejoro la marca que hice aquí en el 2012, sólo pesaba un kilo más y la he mejorado en 2 minutos y eso que en el 2012 llevaba corriendo ya 6 años, así que todavía por suerte los años no me están pasando factura y soy capaz de correr 7 años después más rápido aún que entonces (con pesos similares). Tengo marcas mejores en este circuito, pero con pesos bastante más bajos que ahora, de 10 kilos menos. La experiencia ha sido un buen grado y he sabido leer perfectamente la carrera, administrando muy bien las fuerzas y apretando cuando había que apretar, sin precipitarme, sin gastar mucho al principio, sin cebarme, así que de fábula. Las piernas acompañaron y el cardio también, sino todo habría sido mucho más complicado y quizá no habría podido bajar de la hora.

Tras la carrera, volvimos los tres a casa de los amigos que allí nos esperaban, me duché, charlamos, más juegos con la peque y a las 9:15 de la noche de vuelta a León, llegando a las 10:45; la peque a esa hora mosqueada, de llorera, sólo tomó medio biberón y a dormir y es que se nos fue de las manos un poco la hora, pues generalmente a las 9 ya está cenando.

Gran día, pero las rodillas quedaron algo tocadas, molestas por el duro asfalto de esos 10 kms, pero muy contento de ir a por la sub hora y traérmela. No sabía cómo iba a estar al día siguiente por la mañana para los 10 kms de la Bañeza y a Jose Manuel le comente mis dudas y me aconsejo que no arriesgara pero arriesgué. Un compromiso es un compromiso y el domingo tocaba ayudar al equipo en la Copa a sumar puntos.

Tras milagrosamente dormir 5 horas del tirón, antes no dormí nada, a las 7:30 toque de queda, la peque se despertó, durmió 6 horas seguidas y no lo aproveché para hacer lo mismo. Las rodillas estaban todavía algo raras pero no me dolían especialmente, solo estaban algo sensibles y muscularmente también algo cansado, así que nada extremo que me impidiera ir a la bañeza a probar suerte. De desayuno cayó taza de batido de chocolate, dos galletas de chocolate, capuchino y 3 rebanadas de pan. 

A las 10:50 salí de casa y entre que puse el gps y tal, no estuve en marcha hasta las 10:55. A las 11:40 ya estaba en La Bañeza, para evitar contratiempos fui por el peaje, aparque muy bien, sin problemas, a 200 metros de la salida. Nada más llegar me encontré a Alija y luego a Mario, Senen y Oscar, charlamos brevemente y cada quien a calentar y aproveché para ir a por el dorsal y ponérmelo, me regalaban esta vez una tableta de chocolate negro con almendras que a mí me sobraban, pero el chocolate rico, lo probé ya el lunes. Después de quedar de nuevo con el equipo y más charla, toco la foto de grupo. Mis sensaciones antes de la carrera no eran malas pero lógicamente sentía las rodillas algo sensibles, sin embargo muscularmente me notaba medianamente bien, sensaciones raras pero no malas.

A las 12:15 salimos, me coloco como siempre con los últimos, saldré con un chico entrado en carnes como yo, Norberto, que conocía de la Virgen, donde compartimos en marzo unos kms y al final se lanzó y me gano en aquel 10000. Ahora me imaginé que podía pasar lo mismo, pero no era mi guerra, mi guerra y mi éxito era sencillamente completar los 10 kms. Por delante un trazado que contenía unos casi 3 kms de asfalto para salir de La Bañeza y el resto de kms, hasta completar los 10200 metros del recorrido, por una zona de tierra con algo de hierba por los alrededores de la Bañeza, concretamente por la Ribera de los 3 ríos que la circundan, así que salimos juntos. Compartimos zancadas durante un km hasta que percibe que mi ritmo es algo lento, pasamos en 6:06 ese primer km, pero es que era de ligera bajada y asfalto, mis pulsaciones reflejaban mi prudencia, 135, así que él decide irse con Laura y otro chico, dos compañeros de su equipo, yo casi al mismo tiempo, recién abandonada La Bañeza y su asfalto, alcanzo a un chaval que también se ha ido quedando y comparto con él, casi un km, hasta que me doy cuenta de que su ritmo es un poco lento. (Aquí se me ve ir con el talón porque estamos como bajando y no quiero acelerarme- pisada adaptada al terreno y a la fortaleza que se tiene en cada momento).

Pasamos por el km 2 en 6:29 con pulsaciones de 144, voy de pachanga, así que viendo que las rodillas aguantan bien, decido empezar a correr algo más rápido y pasado el km 2.5 y sin forzar voy dejando  atrás a este chico, más porque él se queda que porque yo haya dado algún pequeño hachazo. Vamos avanzando siempre, desde que salimos de La Bañeza, por puro campo, arboledas y caminos de tierra. Parece que mis rodillas no se quejan, así que muy bien, lo que me permite tirar hacia adelante en busca de el que me ganó en La Virgen, de Norberto, Laura y otro compañero de ellos, este último cuando llego se ha quedado unos 20 metros y lo adelanto para enseguida alcanzar al dúo- Laura y Norberto, que van juntos.

En el km 3, que paso en 6:10 y 154 pulsaciones, aún relajado a nivel cardio, me doy el lujo de echar unas bromas y unas risas con ellos y así pasamos el km 4 en 6:34,cuando divisamos a un par de chicas y le digo a Norberto que hay que ir a por ellas, pero nos lo ponen muy fácil porque al rato se ponen a caminar, así que en el km 4.5 aprox, las adelantamos, llegamos al km 5 en 6:17, mis pulsaciones se mantienen estables en 154, hasta que Norberto tira un poco hacia adelante y a eso se une que el perfil asciende ligeramente y nos quiere dejar a Laura y a mi atrás,  le digo que me espere y no me hace demasiado caso, así que incremento un poco el ritmo y llego a él, sin complicaciones. Hasta antes de ese pequeño hachazo de Norberto íbamos los dos de charla y cachondeo, bastante relajado y contento, Laura iba más callada, pero llega el momento de empezar a tirar más de cardio y menos de charla o relax, pasamos por el km 6 en 6:27 y 159 pulsaciones (el tirón de Norberto y el perfil dieron este resultado)  y detrás, a unos 20 metros va Laura.

En este km 6 está el avituallamiento, donde me dice  que caminemos mientras bebemos agua y así lo hacemos brevemente, Laura llega hasta nosotros y vamos un rato de nada, los tres juntos, hasta que esta dice que va a esperar a su compañero de equipo que se ha quedado muy retrasado y le preocupa, nosotros volvemos a correr, cruzamos un puente y veo que Laura nos sigue a unos 30 metros, no parece de momento esperar a su compañero. 

Llegamos al km 7 en 6:44 y 150 pulsaciones medias ( es lo que tiene haber ido un rato caminando que nos vino de fábula) yo me veo bien de piernas y rodillas y pasado el km 7 decido tirar y ponerme a 5:45 por km para abrir hueco y que Laura ya no llegue a nosotros, era de otro equipo y también corremos por equipos y mi gen competitivo a veces luce un poco. Me dice Norberto que soy un cabron por incrementar el ritmo, ya que va detrás mío con la respiración por primera vez algo agitada, vamos corriendo por la Ribera del Rio Tuerto, menudo nombrecito…por un camino estrecho, de uno a uno, no caben más y de tierra como todos estos kms fuera de la Bañeza, de ahí que tomara la iniciativa de ir yo por delante y con un ritmo más alegre que en los anteriores kms. 

Pasamos por el km 8 en 5:47 y 166 pulsaciones medias y como le veo un poco contrariado con el ritmo que llevamos, le digo que venga que iremos más despacio, así que me pongo a cerca de 6 el km, seguimos corriendo ahora codo con codo, miro hacia atrás y Laura ya no está, objetivo conseguido, abrir hueco, así que he dejado atrás a cinco. El chico que deje primero atrás, el compañero de equipo de Laura y Norberto, las dos chicas y Laura es la última en caer.

Hacemos este kilometro juntos, codo a codo y llega el km 9 con pulsaciones de 167 y 5:55 de media, que coincide con la entrada a La Bañeza y la llegada del asfalto, de aquí a meta además de ser solo asfalto, tirará un poco hacia arriba, apenas un 1.5% de media pero que no es llano y es aquí con la llegada del asfalto y la entrada de La Bañeza cuando incrementa el ritmo Norberto con la firme intención de llegar antes que yo a meta, es un ataque de lejos de esos que te hacen daño y que te pueden hacer sufrir si tratas de responder, era un ataque de orgullo, no estaba dispuesto como me dijo, que alguien mayor que él (me llamo indirectamente viejo,,,jajajaja), le ganara. Serán unos 1200 metros finales frenéticos, para él, por las calles de La Bañeza, que recorre a un ritmo medio de 5:37 (potente para ser de ligera subida, que aunque no se ve porque es muy tendida, sí se siente) y yo detrás siempre lo veo y le sigo a unos metros que cada vez son mayores, pero nunca lo perdí de vista. No estaba dispuesto a sufrir para intentar llegar antes que él, aunque habría sido una bonita lucha o pique, pero yo ya había tenido lo mío el día anterior, si hubiera estado más fresco, quien sabe si lo hubiera intentado…

Me fui a 6:12 de ritmo medio, en esos 1200 metros ya que entré andando. Podría haberme apuntado al carro del sufrimiento y tratar de disputar ese puesto pero mi objetivo era simplemente completar estos 10 kms a 7 el km y estaba ampliamente conseguido. Otra cosa es que me jugara un puesto en el podio, ahí sí que lo tendría que haber intentado, pero me limite a mantener un ritmo alegre, por si venia alguien por detrás, con el que sufrí un poquillo por momentos, al no saber dónde andaba la meta. Se me hizo ese km y poco largo, bastante largo diría yo.

En los últimos 130 metros, coincidiendo con una cuesta potente que llegaba hasta la meta, me puse a caminar, tras comprobar que no había nadie que pudiera por detrás inquietarme y tocó  celebrar con brazos en alto, haciendo aspavientos, esta gran carrera, estas dos grandes carreras, este gran fin de semana, inolvidable…y así entro en meta feliz con brazos en alto y con los objetivos de este fin de semana sobradamente cumplidos. Mi tiempo final para estos 10220 metros fue de 1h:04:58, ritmo de 6:21 el km. El km 10 lo pasé en 5:57 y 173 pulsaciones medias. Muy buena carrera, de menos a más y haciendo los últimos kms con bastante alegría, una vez comprobado que las rodillas me dejaban correr bien. Posición 173 de 178 corredores llegados a meta. Gran día, increíble sacar tanto estando limitadillo aún físicamente.

Temperatura para correr de unos 17-18 grados y soleado, sin pasar calor, gran temperatura y sin viento molesto. Nos dieron agua, naranjas, unos calcetines, menos mal y no la típica camiseta y una barra de chocolate negro con almendras, que estaban de más, la verdad.

El circuito era nuevo y la verdad que me gustó, es bastante mejor que el anterior, se puede correr bien, llano y sin repechos importantes, ni bajadas de esas que hay que ir frenando, es cierto que al salir de La Bañeza se tiende a bajar y al terminar a subir, pero apenas se nota, aunque sí que lo notan algo las piernas, el corazón y en consecuencia el ritmo, pero como es a lo largo de un km y poco, pues no se percibe como una dificultad importante.

Tras la carrera me tomo una naranja y media que estaba muy rica y me pongo a charlar un rato con el bueno de Francisco, después, en vista de que todo mi equipo se había ido ya, me voy yo también, esta vez sólo, ya que no vinieron ni Blanca, ni la peque, había que dejar descansar a la peque tras la tunda de ayer. Llego a casa a eso de las 2:30 de la tarde y disfrutamos con una amiga, Sara, de una buena comida a base de hamburguesas de calidad, no de las típicas y buen postre de pasteles de chocolate, muy ricos.

Un fin de semana para la historia ha quedado atrás, por delante nuevos desafíos, retos e historias que seguro que nos siguen arrancando sonrisas y disfrute, pero eso ya serán otros días e historias.

La copa queda aparcada hasta el 3 de agosto por mí, vamos séptimos y mi participación contribuyó a estar como y donde estamos, no fue una presencia estéril como me ha pasado otras veces por ser el más lento del equipo. El 3 de agosto espero dar un salto de calidad y poder correr en condiciones, no con mochila, que eso no es correr es pasar penurias…pinche lastre….