Así voy:
Martes, 23 de febrero: 11.7 kms en 1h:14:27 a 6:21 por km, 155-170.
Acabe bastante destrozadillo, muy
cansado, me costo de hecho correr en la segunda parte de la carrera, como si
estuviera en una media de esas que se hacen eternas y solo vas por el km 15. Así
que cuando termine estos 11.7 kms estaba bastante cascado. En fin, adaptación y
que el cuerpo acusó la competición del domingo.
Jueves, 25 de febrero: 8.84 kms en 51:55 a 5:52 por km, 162-182.
Las pulsaciones ya no salen tan
disparadas como antes, el cuerpo no se siente ya tan sorprendido, confuso y
acelerado por la novedad de la vuelta a esto de correr. Me sentí corriendo muy
fluido, cómodo y en ningún momento sufrí aunque si que en la segunda mitad note
cierto cansancio pero controlado, no de ese que te agota y te hunde en la
miseria como el del martes. Primer entrenamiento sub 6 min por km del año.
Casi sin darnos cuenta ya se nos
han ido dos meses de este año y mañana buscaremos seguir mejorando en mi
segunda competición del año: los 10 kms de la Virgen del Camino, donde el año pasado hice
54:40. En esta ocasión por el rendimiento en los entrenamientos, no debería
tener problema para bajar esos 54:40. Espero empezar tranquilo a 5:30 y
mantener ese ritmo y luego si me veo bien darle caña.
Como ya he dicho, de junio a
noviembre es cuando debo estar a tope. De momento voy por buen camino. Llevo
entrenando 20 días y mis ritmos han pasado de 6:33 del primer entrenamiento a
5:52 del último, con pulsaciones similares. Este año si todo va bien mis
rodajes de cierta exigencia en entrenamientos de 8.84 kms deberían ir a 4:10,
lo que arroja un tiempo de 36:45, frente a los 42:42 que tengo como marca en
esa distancia. 6 min no es mucho, pero en realidad son 15 min, los que tengo
que recortar teniendo en cuenta la marca realizada el jueves. Para llegar a
este nivel deberé subir una serie de escalones, superar una serie de ritmos,
asentarme mínimo en los 200 kms mensuales, dejar atrás la bollería, el nesquik,
palmeras de chocolate, etc...y si esto lo hago así un día me veré haciendo los
8.84 kms de mis entrenamientos a 5:30, luego un tiempo después a 5:15, después
a 5:00, con el paso de las semanas y el entrenamiento volveré yo creo que ya en
verano a los 42:42 que tengo en esos 8.84 kms y después terreno inexplorado y
novedoso, llegara a mis piernas el ritmo de 4:45 por km, luego 4:40, 4:30,
4:20, 4:15 y voalá un día 4:10, jajajaja, desde luego no necesito muchos ánimos
para venirme arriba, jajaja, en fin...que hay que soñar, que es gratis, me
gusta soñar y me viene muy bien, me da cierta fuerza.
La realidad es que del primer
entrenamiento de este mes de febrero a este último, ambos de igual distancia y
similares pulsaciones he recortado 6 minutos, ahora tengo por delante 9 minutos
que bajar para llegar a los 42:42 de mi marca personal en esta distancia y de
ahí iremos viendo hasta donde se puede llegar este año o el siguiente o el
otro, el caso es seguir insistiendo, seguir queriendo, seguir empujando, seguir
soñando, seguir creyendo, seguir y seguir y seguir...no parar, nunca parar
hasta estar satisfecho con lo que se quiere, se busca y se desea.
Dejando los sueños y volviendo a
la realidad, pisando bien el suelo, mañana lo que si que debe salir es ese sub
54:40, lo veremos.
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