MIENTRAS EL GUERRERO DESCANSA, APROVECHA PARA CUMPLIR AÑOS. 85.6 KILOS

Una vez dejada atrás la opción de completar mi primera maratón toca ir entrando y entrenando de cara al nuevo objetivo, ser sub 2 horas en media maratón que para mi es un reto bastante bonito.

Tras darme cuenta de que Sevilla estaba lejos, muy lejos tanto en la distancia como objetivo a conseguir por temas extradeportivos, tras completar 8 grandes semanas de entrenamiento que ahí quedan para en mi caso enmarcar y suponen situar mi listón bastante alto que algún día habrá que superar; he de reconocer que un poco por el mal tiempo con sus lluvias y fuertes vientos y un poco la necesidad de desconectar para darle al cuerpo descanso físico (así además mi molestia del tobillo no iba a mas) y también anímico, porque efectivamente en ambos aspectos uno se va cansando; desde el día 2 de febrero mis entrenamientos se han ido espaciando en exceso y así han quedado:

Domingo, 9 de febrero:  15.500 metros en 1h:43:14 a 6:39 por km, 150-164, nivel 13.

                                        1.850 metros en 13 minutos a 7:01 por km.

Tras este entrenamiento acordamos mi mujer y yo el no ir a Sevilla, no como ya he dicho por un tema físico sino por otros temas aunque el tobillo cierta inseguridad si que me daba ya que en este entrenamiento acabe con el tobillo cargado y es que las voladoras, que en este caso volví a usar, me lo cargan mas de la cuenta. Tras los poco mas de 15 kms llegue a la pastelería a comprar los ya tradicionales cruasanes y luego 1.850 metros hasta casa que con los cruasanes en mano se hacen mucho mas llevaderos al pensar que uno al llegar a casa tiene un rico desayuno, jajaja. Lógicamente note el paron de una semana. Toco correr mientras caía una buena nevada lo cual le dio un toque original al entrenamiento.

Miércoles, 12 de febrero: 15.510 metros en 1h:39:50 a 6:26 por km, 158-184, nivel 13.

En este caso me dio por querer activar de nuevo el corazón tras los días anteriores haber perdido comba y salio muy bien la cosa, yendo de menos a más y con los tanques. Pase por el km 5 en 29:16 para de ahí ir cogiendo velocidad hasta llegar al km 10 en 56:58 lo cual supone un nuevo record de 10 kms desde que vivo en León, quede muy contento como es lógico. No pare tras los 10 kms y seguí corriendo 5 kms a ritmo muy, muy, muy lentito, pase frío, estaba nublado y había mucha humedad que se metía en el cuerpo, que días tan desapacibles...

Lunes, 17 de febrero: 15.500 metros en 1h:53:52 a 7:20 por km, 139-157, nivel 13.

Ayer las piernas notaron la falta de continuidad en los entrenamientos y pese a ir sobrado de corazón no disfrute en lo absoluto por sentirme flojo, muy flojo de piernas. Tanto las piernas como el corazón por esta falta de continuidad en estas dos últimas semanas van perdiendo fuelle pero espero desde esta semana empezar a recuperar terreno y no hay mejor forma que el primer día de la semana haberlo estrenado con estos poco más de 15 kms. Estuvo nublado casi todo el tiempo pero ni hacia frío, ni había humedad, menos mal.

La semana pasada ya supuestamente enfocado en la Media de León tendría que haber sumado kms el viernes pero era el día de los enamorados y lo reserve para mi queridísima enamorada y el domingo también tendría que haber sumando kms pero la resaca de mi cumpleaños me lo impidió. A veces no se puede estar en todos los frentes. Y más sin una maratón a las puertas que obligue a ello.

El día 14 de febrero fue el día de los enamorados y le regale a Blanca un bonito ramo de flores, se lo merece. También comimos de lujo unos tacos mexicanos y almejas a la marinera y en la cena más almejas a la marinera, un gran día sin duda alguna.

El día 15 de febrero me cayeron 41 tacos. Si los 40 años fueron una broma, los 41 han sido una broma pesada pero es lo que hay, ley de vida. Menos mal que mi mujer, que es una magnifica chef, me hizo una exquisita tarta de chocolate de la que ya no queda nada y es que la mitad de un cuarto se lo dimos a nuestra amiga Sara y mucho del resto me cayó a mí, la quería haber congelado pero no se dejo, se sublevo.

Por la mañana de ese memorable día fuimos a comprar mis regalos y los de Oscar y Alberto que celebraron conmigo el cumpleaños porque sencillamente son buenísima gente, grandes donde los haya y les deje compartir protagonismo, jajaja o ellos a mi, jajaja o todos a todos. Yo no vi mi regalo, las chicas (Blanca, Bea y Sara) me hicieron esperar pacientemente fuera de una tienda de deportes y he de reconocer que para ser mujeres compradoras tardaron poco, así que muy bien.

Por la noche, como a las 8:30, fuimos Blanca y yo a comprar unos collares (cuelgas) de chucherías que son típicos de aquí de León y que se los ponen los afortunados que cumplen años durante la noche de farra. Después fuimos a casa de Sara y de ahí fuimos a reunirnos con el resto en la famosa pizzeria de la competencia. Destacable la ausencia de Alberto y Bea, y es que la pobre Bea se cogio en la comida una indigestión; la verdad una gran pena, porque los amigos cuantos mas mejor y mas en un cumpleaños.

Antes de salir de casa y vernos todos, precene en casa mi leche con Nesquik, cereales rellenos de chocolate, bastante tarta de chocolate y pensé que no me quedaría espacio para pizza pero fue verlas y entraron perfectamente, pidieron 8, mas dos ensaladas, mas croquetas de cecina y jamón. Yo me comí casi una pizza y croquetas, la ensalada pal que la quisiera, ya no tenia espacio para más.

Después el grupo entero fuimos a disfrutar de los bares, de los copazos y la música que ponen en ellos hasta las 3 de la mañana en el caso de Blanca y mío y es que había que recogerse pronto que uno esta un poco mayor y como están las cosas en las frías noches leonesas se puede uno resfriar. Otros se fueron antes y la mayoría antes de las 4:30, así que tampoco nos fuimos tan pronto. Aproveche para bailar mucho y con bastante agilidad para que me contara como entrenamiento cruzado, bailando tengo un movimiento de pies muy similar al de Muhammad Ali cuando preparaba su golpe en el ring.

 

El domingo, siguiendo con los faustos de mi cumpleaños, Bea y Alberto (que majos son) se ofrecieron a llevarnos a Blanca y a mí a comer a Boñar, además el sábado como dije, no pudieron venir a la celebración y por tanto era una magnífica excusa para vernos, también se apunto Sara. Comimos en un famoso restaurante del lugar pegados a la chimenea unas ricas croquetas, un buen solomillo de buey, un riquísimo y excelentísimo cocido con su sopa y sus garbancitos, sus buenos chorizacos, su verdurita, su pan con perejil y ajo y su rica carne  y de postre natillas y los famosos nicanores con chocolate, que bien comimos¡¡¡,uau¡¡¡.

Después de comer bien, muy bien, francamente bien; vimos la famosísima Plaza El Negrillón, que tiene como protagonistas al Maragato, un hombre de madera situado en el campanario de la Iglesia de San Pedro (S.XVII) que hace como que toca las campanas y cuyo reloj que pone al día y cuida el mismo relojero de la puerta del sol, data de 1861. También adorna la plaza El Caño que es una fuente de dos grifos y por ultimo la plaza tiene como indiscutible protagonista el famoso tronco del árbol centenario (S.XVI) El Negrillón, de ahí el nombre de la plaza y que a pesar de estar muerto y seco por una enfermedad que le ataco en los ochenta, es el símbolo de esta villa. Después fuimos al Museo de la Fauna Salvaje, a unos 12 kms de Boñar donde pudimos ver unas crías de corzo, algunos corzos adultos, y entramos al vestíbulo del museo para ver lobos, algún oso, un jabalí, ciervos y aves, todos ellos disecados. El entorno muy bonito y nevado, pese a que la nieve estaba algo dura dio para lanzarnos algunas bolas. Después de esto cada uno a su casa y así terminaba este fin de semana tan especial, bonito y fantástico marcado por los enamorados y por los que cumplimos años.

Una vez acabado el descanso, una vez pasados los tres días de celebraciones por mi cumpleaños; llegó el momento ideal para ponernos finos de cara a la Media y el entrenamiento de ayer así lo demostró, me dio una pereza grande salir pero había que romper con el descanso excesivo en el que estaba inmerso. Como no hay mal que por bien no venga mi tobillo esta 100% activo y listo para seguir sumando, así que es una buena forma de empezar esta preparación, con cada parte del cuerpo puesta y dispuesta a darlo todo en los entrenamientos que quedan de aquí al 16 de marzo y es que el tiempo no espera a nadie y hay que subirse cuanto antes al tren, en mi caso ha sido por fin hoy y ese tren espero que me lleve a correr por debajo de las 2 horas en la Media que aunque aparentemente parece que ya los valgo, no basta valerlos hay que hacerlos, como no basta sentir que uno es maratoniano, hay que serlo; además el paron de dos semanas salpicado con algún entrenamiento me ha hecho perder comba y estoy un poco fuera de juego respecto al que completo su ultima competición de 9.670 metros en 49:09. Menos mal que de peso me mantengo y estoy como hace dos semanas.

Mi peso actual es realmente milagroso porque encima que apenas he hecho ejercicio, no he parado de comer dulce y ayer estaba en tan solo 85.6 kilos, manteniendo muy bien el tipo, que milagro...increíble...pero no hay que confiarse, hay que seguir controlando el tema.